Fácil es hablar o en algunos casos alucinar, cuando sabemos que el
papel lo aguanta todo, sí todo, incluso las faltas de ortografía, pero a eso ya
estamos acostumbrados conociendo a la persona de quien vienen.
"El Brayan"
Crearse una vida supletoria, para querer formar parte vinculante de
un grupo al que nunca se fue parte, vislumbra ciertos traumas o complejos no
superados de niño. Tanto es así, que aprovechando su minuto en el Poder y
gracias al hoy denunciado Consejo Directivo de García Otoya, se le
obsequió una membresía al club al que
tanto anhelaba pertenecer y que de otra forma (legalmente) no hubiera podido obtener.
Gracias a su habilidad para trepar muros, porque sólo así podía
entrar a nuestro club y claro como invitado de Robles Pacheco, Lalo se ve así
mismo y en retrospectiva como niño símbolo de la lucha contra la corrupción,
curiosamente de la cual hoy forma parte. Quizás lo llamemos de nuevo, ahora en
su traje de Spiderman, para que filme las propiedades del presidente de Rodolfo
García Otoya y su hijo, que por tráfico de terrenos obtuvieron en Punta Negra
en colusión con el Alcalde y que con la plata de los socios vienen construyendo.
Bueno, algo que no podemos negar es que Lalito trepando muros siempre fue
bueno. (aunque arribista sería mejor empleado por algunos)
Lalo García Robles Comienza su historia con la triste anécdota de
un padre pobre (esta parte sí te creemos Lalo) que después de muchos años
regresa al club (claro, si nunca fuiste socio) y que no podía costear un juego
inflable para su hija; exaltando sentimientos de populismo y asistencialismo, a
los cuales personas que quieren todo gratis como Lalo, están acostumbrados. Si te dan algo gratis, duda, te lo están cobrando por otro lado, o lo que es peor están robando por otro lado.
El Juego inflable era un concesionario, lo que significaba un
ingreso para el club; el club además tenía sus propios juegos sin costo, pero
como dice el dicho: “el que no paga siempre es el que más exige”, y a Lalo le
pareció mucho en ese entonces.
El Remanso tiene juegos para pago y otros gratis, el Regatas igual. ¿De qué se queja Lalo?
Ahora como nuevo Coordinador de Comités, sin experiencia alguna
para el cargo y con el sueldo más alto en la historia del club S/ 7,000.00
soles mensuales; esa anécdota, si será cierta, se va ahora tan lejana...
Si el Bosque realmente fuera la casa de Lalo, este sujeto no
cobraría cupos a profesores y entrenadores deportivos a cambio de ser
contratados. Además, colocó permanentemente a su hija, esa que no pudo subirse
al saltarín porque su papi no tenía 5 soles, como show exclusivo del Club,
presentándose cada fin de semana en Playa, Chosica o Surco y cobrando lo que
quiere con tal de sacar tajada y provecho. Eso es lo que hacen tipos como tú
Lalo, un envidioso que sólo quiere aprovecharse de una situación que no fue hecha
para él, algo para lo que no naciste, y no me refiero a ser socio, porque
bienvenidos sean los nuevos asociados, sino a ser gente, a ser probo, legal.
Tú, como aquel hambriento de la calle que se le lleva comer por
primera vez en una cena de gala, no respetarás los modales, ni a los otros
comensales, sólo te preocuparás de saciarte, ensuciando y salpicando, y aunque
estés lleno seguirás vació porque sabes que, lo que por el momento tienes, se
irá y seguirás pasando hambre nuevamente.
Es por eso que siento lástima por mi segundo hogar, donde en mi
caso, dos generaciones aprendimos a caminar y a disfrutar cada día de ese
espacio respetuoso con la naturaleza y las personas. Ahora, ha llegado una
banda de delincuentes amparados en leguleyadas para llevarlo a la bancarrota.
Lalo por ser compinche de esta gentuza ha calzado perfecto por su perfil
codicioso.
“Más que un club una familia” Claro, calza perfecto, si se refiere
al NEPOSTIMO que favoreció a su hija Malorine de Oh Maly, o al de la Fuente de
Soda donde se favoreció al hermano del Secretario David López Zanelli o el hecho
de cerrar dos fines de semana la Sede Playa para que se case el manganzón del
hijo del presidente García Otoya y darle como regalo de bodas, alojamiento todo
el verano y dos concesiones a dedo en Sede Playa. Ahora que acabó la temporada,
en Sede Chosica ya tiene el Karaoke. Quizás pueda ampliarse a “Más que un ladrón,
una pandilla”.
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